Revista Cambio, 4-10 de junio 2017
Los años 2016 y 2017 fueron políticamente intensos en el Reino Unido. Primero fue el Brexit, que cubrí desde varios ángulos, el social, el finaciero y el empresarial. Segundo, la elecciones generales que se celebraron el 8 de junio de 2017 y que alzaron a Theresa May, del partido conservador, como primera ministra del país. La celebración de los comicios tuvo lugar pocas semanas después del atentado terrorista en el Manchester Arena, durante un concierto de Ariadna Grande, y en el puente de Westminster, en Londres.
Estas elecciones anticipaban el cambio en la tendencia del voto de los británicos de origen migrante, tradicionalmente fieles al partido laborista. Lester Holloway, del think tank Runnymede y Fizza Qureshi, directora de Migrant’s Rights Network, contextualizan estas elecciones generales desde el punto de vista de los migrantes, y Wendy, una enfermera de Ghana que trabaja en la NHS, el Sistema de Salud Pública del Reino Unido, expresa su intención de voto.



